Biogás

¿Qué es el BIOGÁS?.. ¿Cómo se obtiene?

Con el transcurso del tiempo se ha vuelto necesaria la aplicación de tecnologías de bajo costo y fácil aplicación, para la generación de energías alternativas que contribuyan al mejoramiento y conservación ambiental. Es así como mediante el estiércol animal, y demás desechos orgánicos se ha venido produciendo biogás.

El término biogás designa a la mezcla de gases resultantes de la descomposición de la materia orgánica realizada por acción bacteriana en condiciones anaeróbias (sin presencia de oxígeno). El biogás se produce en un recipiente cerrado o tanque denominado biodigestor.

Existe gran cantidad de pequeños productores que no dan tratamiento alguno a las excretas y las arrojan a pequeñas fosas o incluso directamente a pozos o partes bajas de la granja propiciando serios problemas de contaminación por coliformes y nitratos en suelos y acuíferos.

El objetivo de un Biodigestor es darle utilidad a las excretas líquidas y transformar las aguas contaminantes en biofertilizantes. Pues las excretas contienen nutrientes que los cultivos pueden utilizar, pero también contienen altas concentraciones de coliformes fecales que producen enfermedades infecciosas, capaces de causar hasta la muerte en los humanos.

Por ello, para utilizarlas como fertilizantes, es necesario darles un tratamiento que elimine esos agentes infecciosos. Una forma de hacerlo es mediante la biodigestión.

Al usar un biodigestor se utilizan los nutrientes contenidos en las excretas, reduciendo la contaminación ambiental, convirtiendo las excretas con contenido de microorganismos patógenos en residuos útiles y sin riesgo de transmisión de enfermedades.

El método básico de operación consiste en alimentar al digestor con materiales orgánicos y agua, dejándolos un período de semanas o meses, a lo largo de los cuales, en condiciones ambientales y químicas favorables, el proceso bioquímico y la acción bacteriana se desarrollan simultánea y gradualmente, descomponiendo la materia orgánica hasta producir grandes burbujas que obligan su salida a la superficie donde se acumula el gas.

Existen diferentes formas de biodigestores, pero el más utilizado es el de forma cilíndrica, el cual tiene una tubería de entrada por donde ingresa la materia orgánica mezclada con agua, y una tubería de salida en la cual existe una descarga de un material con baja carga contaminante, el cual puede ser utilizado en labores de fertilización de pastos o como abono en los cultivos. El proceso de digestión que ocurre en el interior del biodigestor libera la energía química contenida en la materia orgánica, la cual se convierte en biogás. Los principales componentes del biogás son el metano (CH4) y el dióxido de carbono (CO2).

Todos estos conceptos son los que aplicamos desde Febhogar para nuestros desarrollos, que actualmente están enfocados a la generación de electricidad.